Las plantas de energía inteligentes permiten un control inteligente del proceso de generación de energía, que abarca la predicción automática, la toma de decisiones y la autoevolución. Al recopilar datos en tiempo real sobre los riesgos operativos y de producción, aprovechan los algoritmos y modelos de inteligencia artificial para evaluar los riesgos y generar soluciones automatizadas.
Estas plantas tienen como objetivo construir instalaciones modernas que sean eficientes, ahorradoras de energía, ecológicas, respetuosas con el medio ambiente, seguras y confiables. Implementan mecanismos de detección y alarma de extremo a extremo, desde el monitoreo de los niveles de contaminantes en el carbón hasta el seguimiento de la combustión en tiempo real, con todos los datos cargados y accesibles públicamente, lo que garantiza informes transparentes sobre las emisiones.
Las plantas de energía inteligentes están diseñadas con capacidades inteligentes integradas, lo que brinda a los gerentes acceso oportuno a datos históricos y en tiempo real, al tiempo que pronostica tendencias futuras para guiar las estrategias operativas.
A través de la construcción de una plataforma de integración de big data, se establecen nuevas operaciones comerciales y de producción, rompiendo los silos de información y permitiendo una coordinación y eficiencia fluidas entre la producción, los procesos comerciales y las organizaciones internas (sede y sitios). Esto crea un novedoso modelo inteligente de gestión de la energía.
Con la plataforma, las centrales eléctricas inteligentes adoptan un modelo híbrido de "centros" virtuales y organizaciones físicas, junto con marcos de transformación digital. Se establecen seis centros clave: Sistema Estándar, Monitoreo y Programación de la Producción, Alerta Temprana de Producción de Seguridad, Planificación Integral, Evaluación del Desempeño y Apoyo a la Toma de Decisiones, para facilitar la gestión centralizada de la energía y el desarrollo a gran escala.
Las plantas de energía inteligentes permiten la operación y el mantenimiento de equipos inteligentes, incluido el monitoreo de condiciones en tiempo real, el diagnóstico de fallas y la alerta temprana, y la inspección y el mantenimiento inteligentes. La tecnología IoT permite la recopilación y transmisión de datos en tiempo real desde los equipos, proporcionandoO&Mpersonal (personal de mantenimiento) con información precisa sobre el estado.
Mediante la aplicación de big data e inteligencia artificial, el análisis en profundidad de los datos de los equipos predice los patrones del ciclo de vida y los posibles puntos de fallo, lo que ofrece bases científicas para el mantenimiento preventivo.
Las centrales eléctricas inteligentes proporcionan apoyo científico para las decisiones empresariales a través del análisis de big data y la IA. Al extraer y analizar grandes conjuntos de datos, descubren correlaciones y patrones para informar la planificación estratégica, la programación de la producción, el marketing y otras áreas críticas.
También cuentan con sistemas inteligentes de alerta temprana y respuesta a emergencias. Cuando se producen fallos o anomalías en los equipos, las alertas automatizadas desencadenan el desarrollo inmediato de planes de emergencia, lo que garantiza operaciones seguras y estables.
Las plantas de energía inteligentes pueden ofrecer a los usuarios servicios más inteligentes y convenientes. A través del Internet de las cosas (IoT) y las tecnologías de big data, se puede lograr el monitoreo y análisis en tiempo real de los datos de consumo de electricidad de los usuarios, brindando a los usuarios sugerencias personalizadas de uso de electricidad y soluciones de ahorro de energía.
Al entablar una comunicación bidireccional con los usuarios y abordar con prontitud sus necesidades y comentarios, estas plantas mejoran la satisfacción y la lealtad de los usuarios.